Presidente de la Asociación International de Correcciones y Prisiones (ICPA)
JT: ¿Cómo es ser el presidente de la única comunidad global para profesionales de correccionales?
PS: Es genial, muy interesante y tengo el privilegio de trabajar con miembros de la Junta muy dedicados y comprometidos que, a pesar de tener trabajos muy ocupados, hacen mucho trabajo voluntario. Lo mismo se aplica para el personal y los miembros de ICPA. Es notable que en este campo siempre he conocido a personas muy autodidactas.
Convertirme en el presidente de ICPA a fines de 2011 fue una transición agradable desde mi trabajo anterior. Fui Jefe del Servicio Penitenciario holandés durante casi 12 años, y mi interés por la cooperación transnacional ocurrió al comienzo de esa carrera, cuando visité países de Europa del Este con algunos de mis gobernadores y me mostraron cómo estaban ayudando, a los sistemas de eses países, a mejorar. En ese momento, reconocí que compartir conocimiento y prácticas realmente podría hacer la diferencia y, para mi personal, también fue un enriquecimiento. Solía decirles, a mi personal, que somos afortunados de vivir en un país donde tenemos un sistema penitenciario bien desarrollado y que, en realidad, es un deber moral para nosotros ayudar a los países que no cuentan con tantos recursos. Esas visitas me entusiasmaron hacia al trabajo internacional, por lo que me alegró mucho el haber sido elegido presidente de ICPA.
JT: ¿Cuál es la misión principal de la ICPA?
PS: Nuestro principal objetivo es promover políticas y estándares para prácticas correccionales humanas y efectivas, asistiendo en su desarrollo e implementación. Apoyamos a los profesionales de servicios correccionales y de prisiones para mejorar el profesionalismo y queremos brindar una plataforma inclusiva y segura para el intercambio de conocimiento, mejores prácticas, tecnología e innovaciones. Además, promovemos y compartimos prácticas correccionales éticas y efectivas para mejorar la seguridad pública y crear comunidades más saludables de todo el mundo. Creemos que el encarcelamiento se utilizará como último recurso, por lo tanto, apoyamos el desarrollo de sanciones alternativas y medidas en la comunidad. Creemos en la integridad, profesionalismo y en el intercambio de conocimiento. Finalmente, creemos firmemente en la capacidad de cambio positivo y en la dignidad de las personas; es nuestro deber proteger sus derechos.
JT: ¿Cuáles son los principales desafíos en este momento?
PS: El mundo está cambiando a un ritmo dramático; hay un cambio tecnológico – que, en sí mismo, es un importante motor de cambio – y también están los cambios culturales y crisis financieras globales. Sin embargo, el próximo año es el vigésimo aniversario de ICPA y enfrentamos el futuro con un enfoque positivo. Tenemos una base sólida que consiste en un equipo fuerte y una gran riqueza de conocimientos, por lo que ICPA seguirá existiendo para promover las mejores prácticas en materia de correcciones en un mundo en el que enfrentaremos mayores desafíos y presiones como jamás antes había sucedido. Es importante que ICPA procure ser justa, inclusiva y abierta, para que podamos estar unidos y juntos para ser la voz que represente las agencias correccionales profesionales.