Mitigar la amenaza de la violencia selectiva: el Protocolo de Evaluación de Radicalización Terrorista

Artículo

Dr. Reid Meloy

Se considera que el terrorismo, y en particular el terrorismo de actores solitarios, es una importante amenaza para la seguridad nacional en Norteamérica, Australia y Europa. Tanto el sector público como el privado están preocupados por esta cuestión, ya que los datos indican que los actores solitarios representan el mayor riesgo de atentado terrorista nacional.

El desafío más arduo en la lucha contra la amenaza de violencia selectiva radica en que la radicalización y la progresión hacia la violencia pueden producirse en gran medida en línea. Esto significa que el proceso puede ser sumamente complejo de detectar, especialmente en las primeras fases de investigación y planificación de un atentado.

Las organizaciones deben desarrollar habilidades para recopilar información tanto en línea como en el terreno cuando se identifiquen individuos y comportamientos preocupantes.

En este proceso, es fundamental respetar los derechos de privacidad y las protecciones constitucionales de las personas en las democracias que funcionan.

Sin embargo, también es relevante no sobreestimar los derechos de privacidad, reconociendo que la abundancia de inteligencia de fuente abierta en Internet hace que sea fácilmente accesible, y que el riesgo inminente de violencia generalmente subsume los derechos de privacidad en la mayoría de las situaciones legales.

Aprovechar las nuevas tendencias para combatir la violencia selectiva

En este ámbito se están desarrollando dos grandes tendencias: los equipos y las herramientas. Las organizaciones deben aportar a mejorar sus sistemas de detección precoz, tales como el aprovechamiento de los protocolos de evaluación de amenazas, el intercambio de inteligencia y la participación de la comunidad.

Es esencial establecer equipos multidisciplinares de gestión de amenazas y utilizar instrumentos estructurados de juicio profesional para evaluar el riesgo en casos individuales.

Otra tendencia muy prometedora y nueva es la creación de equipos regionales de gestión de amenazas enfocados en la evaluación de los riesgos interjurisdiccionales de violencia selectiva. La mitigación eficaz de la violencia selectiva requiere la colaboración entre las diversas partes interesadas, y el fomento del intercambio de información, la coordinación y la cooperación entre organismos puede contribuir a detectar posibles amenazas e intervenir con celeridad.

El origen y la función del Protocolo de Evaluación de la Radicalización Terrorista-18 ™ (TRAP-18)

Durante los últimos 15 años, al constatar la enorme dificultad que los profesionales de la lucha contra el terrorismo experimentaron al tratar de priorizar los casos de acuerdo tanto con la inminencia y la gravedad del riesgo, comencé a desarrollar una plantilla de organización para evaluar el riesgo de un ataque terrorista, el Protocolo de Evaluación de la Radicalización Terrorista-18™ (TRAP-18).

El TRAP-18 es un medio para que los profesionales de la salud mental, los servicios de inteligencia, las fuerzas del orden y la seguridad puedan organizar la acumulación de datos operativos sobre una persona de interés.
 
Este enfoque estructurado ayuda a determinar el riesgo y a planificar estrategias de gestión para reducir la amenaza de violencia específica. El instrumento se ha concebido con el propósito de codificar ocho comportamientos de alerta próximos y diez características distales a más largo plazo.
El TRAP-18 es utilizado actualmente por expertos en contraterrorismo en Norteamérica, Europa, Australia y Sudáfrica, y entre las herramientas disponibles para evaluar a individuos bajo sospecha de actividades terroristas, destaca por ser la más validada científicamente.

La investigación ha demostrado que el TRAP-18 dispone de una excelente fiabilidad entre los evaluadores y una prometedora validez de contenido, criterio, discriminante y predictiva.
 
Se han realizado estudios comparativos y post predictivos tanto de mi grupo de investigación como de fuentes independientes que han demostrado la capacidad del TRAP-18 para diferenciar entre atacantes y no atacantes y para proporcionar estimaciones precisas del riesgo. La investigación sigue comprobando su eficacia.

Uno de nuestros esfuerzos de validación más recientes fue un estudio de secuenciación temporal de 125 terroristas solitarios, que llevamos a cabo en conjunto con nuestros colegas investigadores del University College de Londres.

En esta investigación pudimos proyectar un mapa de los indicadores TRAP-18 y mostrar como es probable que aparezcan en un caso de terrorismo. Por ejemplo, sabemos que la fijación (preocupación por una causa) suele preceder a la identificación (verse a uno mismo como un soldado de la causa). Este último indicador es un potente predictor de un mayor riesgo en un caso.

En otros estudios, hemos demostrado cómo el comportamiento de advertencia de último recurso – una acción violenta o un imperativo de tiempo – es un predictor de alto riesgo en situaciones de terrorismo.

Para obtener más información sobre TRAP-18, póngase en contacto con MHS en: CustomerService@MHS.com

Dr. J. Reid Meloy es un psicólogo forense colegiado que ha sido asesor de la Unidad de Análisis del Comportamiento del FBI en las dos últimas décadas. Lleva treinta años asesorando, investigando, enseñando y escribiendo acerca de trastornos de la personalidad, psicopatía, acoso, narcisismo, criminalidad, trastornos mentales y violencia selectiva. El Dr. Meloy es coeditor con el Dr. Jens Hoffmann del International Handbook of Threat Assessment (Oxford University Press), que ganó el Premio Manfred Guttmacher de la Asociación Americana de Psiquiatría en 2022. El Dr. Meloy es el autor de MHS’ Terrorist Radicalization Assessment Protocol-18.

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